Por Ángel Machado
Chávez tenía una frase sobre nuestro estado “Que el Zulia sea lo que siempre ha debido ser”, con esto hacia referencia a la riquezas de nuestro estado. Sin embargo, la revolución ha sido una gran peste, convirtieron al estado más pujante de Venezuela en la capital de zombies del mundo.
La destrucción en las calles de Maracaibo cada día es más evidente, parece que pasó un huracán por la ciudad y arrasó con todo a su paso. Desde que en diciembre tomó el poder Omar Prieto la crisis económica y social se masificó. Las calles son un caos, hay colas por todos lados, gente lamentándose de como la hiperinflación golpea sus bolsillos, desapareció el transporte público, el alumbrado público es inexistente, la inseguridad es galopante y la lista de problemas es interminable.
Maracaibo en 1888 se convirtió en la primera ciudad de Venezuela en contar con electricidad y hoy, solo tenemos energía eléctrica de vez en cuando. Actualmente hay racionamientos de hasta 18 horas, en lo que va de año han ocurrido más de siete explosiones en subestaciones y más de 10 apagones generales. La crisis eléctrica causada por la falta de inversión y la corrupción cada día es más evidente y el régimen no ofrece ninguna solución a corto, mediano y largo plazo.
Luis Motta Domínguez y Omar Prieto solo saben mentir reiteradamente asegurando que solucionaran la crisis eléctrica en pocos meses, pero con su ineficiencia e incapacidad nos están obligando a regresar a la época de los candiles de barro con kerosene o aceite de coco que fueron sustituidos por la energía eléctrica el 24 de octubre de 1888.
En una de sus recientes visitas, Motta Domínguez aseguró que racionaran la electricidad “las horas necesarias”, pero como él no vive en el Zulia no le afecta estar más de 10 horas sin electricidad en una ciudad con un sol inclemente y una sensación térmica superior a los 40 grados centígrados.
Sin embargo, la crisis eléctrica no es el único problema que agobia a los ciudadanos, también vivimos una crisis hídrica, hay zonas de la ciudad en las que llevan más de una semana sin recibir el vital líquido y la única respuesta de las autoridades es que por las fallas eléctricas no se está cumpliendo el esquema de distribución de agua potable.
Si hablamos del tema de salud, cada día es más crítico en los hospitales no hay insumos. Cada día es mayor la cantidad de médicos y enfermeros que renuncian a sus cargos por los salarios miserables que perciben. 70% de los quirófanos del estado están cerrados, 95% de los laboratorios no tienen reactivos para procesar las muestras, 50% de las camas están inoperativas y la escasez de medicamentos esenciales es de 99% y el régimen sigue negándose a abrir un canal humanitario para salvar la vida de tantos venezolanos que está en peligro por la falta de medicamentos esenciales.
En su campaña, Omar Prieto prometió que “sus banderas serían la de la seguridad, la paz, la defensa del Zulia” y hasta ahora, no ha cumplido ninguna. No lo hemos visto levantar su voz para que el régimen de Maduro solucione la crisis eléctrica, en materia de seguridad los homicidios, robos y atracos siguen a la orden del día, no hay patrullaje policial y regresaron los secuestros al estado. También prometió acabar con el “bachaqueo” de alimentos y con la reventa de productos a precios exorbitantes en el Mercado Municipal “Las Pulgas” y la realidad es que cada día crece la reventa de alimentos a precios especulativos y ni hablar de la venta de efectivo en ese populoso mercado del casco central de la ciudad.
A esta casi interminable lista de problemas, se suma las interminables colas para surtir gasolina, mientras en los alrededores de la Plaza de Toros ante la vista de todos revenden el combustible sin que los cuerpos policiales eviten que se cometa este delito.
El caos y el colapso deben hacernos reflexionar, porque evidentemente los gobernantes no lo han hecho. Aunque sintamos que no hay luz al final del túnel, si la hay, pero para llegar a esa luz debemos aceptar que la salida pasa por todos nosotros. Somos agentes de cambio por naturaleza hagamos que la crisis nos impulse a pasar de la indignación a la acción.
¡Sigamos avanzando con fuerza y determinación!
@angelmachadove
