“Quien ha sido pastor, como lo es el Papa, sabe las consecuencias que tiene este problema, tanto para la persona como para sus familiares”, dice Segundo Tejado
465 expertos provenientes de 63 países participan desde el jueves 29 de noviembre y hasta el sábado 1 de diciembre en el convenio sobre drogas y dependencias organizado en el Vaticano por el dicasterio para el Servicio al Desarrollo Humano Integral. El seminario, que se desarrollará en el Aula Pablo VI, culminará con la audiencia que el papa Francisco brindará el próximo sábado a los participantes, a quienes dedicará un discurso.
El congreso contará con siete sesiones, la segunda de las cuales estará dedicada a las nuevas dependencias, explicó este lunes a los medios Charles Namugera, oficial del citado ‘ministerio’ vaticano y organizador del convenio. “Se tratará la adicción a Internet, a los juegos de azar, al sexo y a la pornografía. Son muchas las nuevas dependencias”, comentó. En esta sección también se tratarán las consecuencias del uso excesivo del teléfono móvil.
“La Iglesia es madre y maestra”
El sacerdote español Segundo Tejado, subsecretario del dicasterio para el Servicio al Desarrollo Humano Integral, destacó la respuesta que ofrece la Iglesia católica a las dependencias por medio de “la evangelización, la formación de personal y el acompañamiento”. Junto a los “discursos teóricos”, brinda además el testimonio de muchos fieles “que ayudan a la gente que cae en la red” de la droga.
“La Iglesia es madre y maestra. Está en la vanguardia en el trabajo de campo. Hay una gran cantidad de organizaciones eclesiales o inspiradas por sus principios que están sobre el terreno ayudando y acogiendo a quienes caen en las dependencias”, dijo Tejado, quien destacó la gran preocupación de Jorge Mario Bergoglio por esta cuestión. “Quien ha sido pastor, como lo es el Papa, sabe las consecuencias que tiene este problema, tanto para la persona como para sus familiares”.
Atención “muy baja” ante las adicciones
El convenio, cuyo título es ‘Drogas y dependencias: un obstáculo al desarrollo humano integral’, trata de llegar a la raíz del problema y no quedarse sólo “en el síntoma” que es la adicción. “Hay que ver por qué la persona cae en esta trampa y cómo se le puede ayudar. Estudiaremos cómo se puede prevenir, el papel de la familia, de la escuela, de la comunicación”, señaló Namugera, subrayando la importancia de “intentar recuperar” al adicto e “integrarlo en la sociedad”. Para ilustrar esa labor se contará con la experiencia de varios centros de acogida a drogadictos.
Nicolò Pisanu, presidente del Instituto Superior Universitario de Ciencias Pedagógicas y Sociales ‘Proyecto Hombre’; de la Federación Italiana de Comunidades Terapéuticas, señaló por su parte la importancia de que el mensaje sobre las dependencias cale en el ámbito educativo, pues nuestra sociedad se muestra hoy “tolerante” y tiene una “muy baja atención” ante este problema.
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