Mensaje especial de Cuaresma – Nueva puerta a la esperanza
Del Padre Arturo Marcelino Sosa Prepósito General Congregación General de la Compañía de Jesús.
En esta cuaresma 2021 sentimos en todo nuestro cuerpo el peso, el cansancio de un año lleno de tensiones e incertidumbre que parece no tener fin. Pero San Pablo les recuerda a los cristianos de Corinto este mensaje dirigido hoy a nosotros en este momento que vivimos. Dice con fuerza: “Este es el momento favorable, este es el día de la Salvación”.
La Cuaresma es una invitación a convertir nuestra Mirada. Junto con la ceniza que hemos recibido el miércoles de ceniza se nos ofrece también el colirio que necesitamos para nuestros ojos para que puedan ver la acción de Dios en este tiempo y sentirlo como el Kairós. El momento favorable.
Hemos recibido la ceniza como deseo de convertirnos al Señor y experimentar que vivimos ahorita el día de la Salvación. Convertir nuestra mirada en el momento que vivimos como humanidad es un esfuerzo árduo. Si repasamos los boletines cotidianos de la Pandemia en casi todos nuestros paises, si volvemos a leer la lista de nuestros hermanos jesuitas contagiados o fallecidos, si repasamos los mensajes de nuestros familiares y amigos, nuestra mirada se nubla. Sentimos la ausencia de Dios y un fuerte deseo de que este momento llegue a su fin.
El mismo San Pablo nos ofrece la clave para romper este círculo, cambiar nuestra mirada y alzar nuestro ánimo abatido.
Les suplicamos dice- en nombre de Cristo, déjense reconciliar con Dios. La posibilidad de nuestra conversión no depende de nuestras fuerzas, menos aun con lo debilitadas que están en el momento presente.
Solamente la acción de Dios puede cambiar nuestras vidas la cuaresma es una invitación a renovar nuestra confianza en Dios a dejarlo actuar en cada uno de nosotros en nuestras comunidades en todo el cuerpo apostólico de la compañía de Jesús del que somos miembros y en toda la iglesia a cuya misión queremos contribuir con todo lo que somos y tenemos abramos nuestro corazón al señor como el abre el suyo no los convertimos al Señor para obtener algún beneficio personal para la compañía o la iglesia no volvemos a Dios para protegerlo de los vales que otros sufren por el contrario lo hacemos para confirmar que somos enviados en misión hacernos sus colaboradores sus embajadores en las actuales condiciones del mundo y su historia en esta cuaresma confirmamos nuestro compromiso de contribuir ver como otros en una misión de reconciliación y Justicia profundizar nuestro compromiso con la selección hecha como miembro del cuerpo por tónico de la compañía de Jesús avanzar en el camino abierto por las preferencias apostólicas universales es lo que transforma la vida de cada uno de nosotros la virgen María supo acompañar a su hijo Jesús también cuando hay uno en el desierto quiere Tania acompañarnos en este tiempo pidámosle a nuestra madre María que nos ayuda a sembrar vida en nuestros corazones abiertos a la acción del espíritu a cuidarla con esmero para que sea el mismo espíritu el que la haga florecer y así contribuir a la vida del mundo.
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