Tras las pasadas elecciones regionales, el Zulia, como San francisco, pasó ser territorio liberado, para el hampa, la inseguridad, las especulaciones, abusos de autoridad, para los bachaqueros y especuladores.
Así lo vemos con los precios de la carne y pollo de la mañana para la tarde aumentaron, ante las colas de los consumidores, que no salen del asombro ante el alto costo que hace imposible adquiri los alimentos básicos mínimos para subsistir.
Solamente en el mes de noviembre la Superintendencia para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) envió un comunicado a La Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga) en la que se fijó el precio de venta al público de la carne, en 38.000 bolívares se reguló el kilo de los cortes de Lagarto con hueso, costilla y hueso rojo. Mientras que el lagarto reina, solomo abierto, pecho, falda, papelón, paleta y el lagarto sin hueso quedó en 47.000 bolívares, según en su momento informó Carlos Albornoz, presidente de Fedenaga.
Este viernes 22 de diciembre, mes y medio después, en las carnicerías de Maracaibo y San Francisco, venden carne en 250 mil bolívares, lo que equivale a un 200 % en mes y medio
“Uno trabaja para comer. El dinero no te alcanza ni para un par de medias”, afirmó una consumidora entrevistada. Ni las fiscalizaciones ni las amenazas a los comerciantes por parte de la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos impidieron que los precios de la carne de res y el pollo se dispararan.
Hasta el jueves 21 de diciembre un kilo de carne se podía conseguir entre 80 mil y 150 mil bolívares, desde este viernes se consigue en los mismos establecientes entre 230 y 280 mil bolívares.
El gobierno no hace para regular o controlar los precios, en las carnicerías y supermercados venden estos productos básicos y necesarios al precio que quieren y quien controla o regula. Donde están las autoridades regionales y nacionales encargados de la fiscalización. Mientras tanto los venezolanos y más los zulianos que vivimos sumergidos en colas para adquirir gasolina, a lo sumo 30 mil bolívares en efectivo, para pagar los poco que se puede en los puntos de ventas y desesperados por no alcanzar los sueldos, bonos de alimentación y navideños ni siquiera para hacer las compras del mercado y cena de navidad.
José R. Espina F.
