Iglesia de Valencia preventiva. Exhortan a “comulgar en la mano” para prevenir la difteria

La crisis humanitaria, con epicentro en la salud pública de los venezolanos, también alcanza la práctica religiosa

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Todos mantienen una tónica común: ser prudentes, responsables, tomando los recaudos necesarios para salvaguardar la propia vida y el bienestar de los hermanos.

La difteria es una de las enfermedades contagiosas que han reaparecido con fuerza en Venezuela como consecuencia de la crisis humanitaria que se vive en el país suramericano. Estuvo erradicada por más de 24 años.

En las últimas semanas se han producido ingentes concentraciones de ciudadanos en los hospitales públicos, solicitando ser vacunados contra esta enfermedad. Aunque el Gobierno de Nicolás Maduro dice que hay suficientes vacunas, no obstante, los operativos médicos solo están dirigidos a los niños que no la tenían y el refuerzo para infantes mayores de 10 años edad.

Uno de los casos más emblemáticos de esta situación es la Ciudad Hospitalaria Doctor Enrique Tejera (CHET), de Valencia, estado Carabobo. Allí fallecieron dos personas con este virus, según confirmó Ronnie Villasmil, presidente de los médicos interinos y residentes, sustentado en un análisis realizado por el Instituto Nacional de Higiene de Caracas.

Iglesia de Valencia preventiva

Debido a esta situación la Arquidiócesis de Valencia comenzó a tomar sus previsiones con un llamado de monseñor Reinaldo del Prette Lisott, exhortando a la feligresía a comulgar recibiendo la hostia en la mano para prevenir contagio de la difteria.

El prelado explicó que el llamado se debe a que la difteria es una enfermedad infecciosa aguda, fácilmente transmisible a través de la saliva, la tos y los estornudos, pero aclaró que no debe ser una exigencia hacia los fieles. Debemos exhortarlos paternalmente a tomar conciencia de la actual crisis sanitaria”, cita el diario El Carabobeño.

Cuando pase el pase el peligro de contagio, los fieles podrán optar por tomar la comunión en la mano o en la boca, como habitualmente lo hacían”, detalló el arzobispo de Valencia.

En boca tapada no entra difteria

Según la Sociedad Venezolana de Salud Pública, las principales manifestaciones clínicas de la difteria son faringitis, amigdalitis, secreción nasal y una membrana blanco grisácea, siendo una enfermedad bacteriana aguda causada por la toxina de la bacteria corynebacterium diphtheriae, que infecta primero la piel y produce posteriormente lesiones cutáneas.

Para prevenir esta enfermedad se coloca la vacuna pentavalente (DTaP, difteria, tetanus y pertusis acelular), que debe ser aplicada en tres dosis y dos refuerzos para una cobertura ideal. La primera vacuna está indicada antes del primer año de vida, sin embargo, en el país esto está lejos de ser la realidad, dicen desde SVSP. Conseguir vacunas en Venezuela es una tarea muy dura y costosa para la gente que no posee recursos económicos.

Entre las recomendaciones de los especialistas se encuentran no compartir comidas ni bebidas, no comer en la calle,  ni saludar con besos, y lo ideal es que la población se salga por estricta necesidad y con tapaboca”.

Aleteia

Monseñor Reinaldo del Prette Lisott,