El Gobierno de Nicolás Maduro no pierde oportunidad para mostrar sus desacuerdos y ofensas contra las autoridades de la Iglesia católica en Venezuela. Sin embargo, el uso y manipulación de la simbología, temas y fechas religiosas, vinculadas a la fe que profesa más del 80% de la población, es una constante en su gestión socialista desde el año 2013.
Una de las actividades de interés religioso más implementadas por Maduro es el “adelanto de la Navidad”. Con esto, buscan crear el espejismo de felicidad en un país sumergido en la crisis humanitaria más severa de su historia, cuyas secuelas maltratan directamente a los más pobres y necesitados, afectándolos, especialmente en la alimentación y en la salud, pero el Gobierno quiere ocultar esa realidad con los Carnavales, Semana Santa y la Navidad.
Desde el 1 de noviembre de este año, a pesar de que en el calendario litúrgico de la fe cristiana todavía faltaban más de cuatro semanas para el Primer Domingo de Adviento, el Gobierno de Maduro implementó su propia agenda religiosa.
“Prendan la luz que es diciembre”, es el eslogan que forma parte del “Plan Especial Navidades Felices 2017”.
“Este es un día muy bello”, dijo el mandatario desde el Palacio de Miraflores, tras colocar una estrella en un “pesebre venezolano” cuyos detalles lo alejan de aquellos que contienen la verdadera tradición en el país.
“Adelantamos la Navidad en Venezuela porque queremos ser felices y vivir en paz”, expresa alborozado en las cuñas que transmiten los medios.
¿El “Niño Chávez”, en las escuelas…?
Un aspecto que delata la intentona religiosa del Gobierno, es el deseo de asociar el “éxito” del fallecido presidente Hugo Chávez (1954-2013), con la gestión de Maduro.
Desde el régimen se ha impulsado que en “El Pesebre” o “Nacimiento Venezolano”, sea colocada una figura que relaciona al difunto líder del Socialismo del Siglo XXI, en lugar del Niño Jesús de la tradición cristiana (según diversas fuentes, quienes sostienen que la imagen se basa en Chávez argumentan que es muy parecida a él cuando tenía unos doce años, principalmente por el cabello, nariz y aspecto zambo, tal cual deja entrever incluso una foto publicada en la Navidad del año pasado por el portal El Machiquense).
A las escuelas públicas llegaron esas instrucciones, según los testimonios.
“El fanatismo de quienes se hacen llamar chavistas no respeta nuestra religión católica. Ahora quieren sustituir en nuestros niños, la verdadera figura del Niño Jesús en el pesebre por la figura de un recién nacido parecido a Hugo Chávez”, dijo para Aleteia la educadora Mariela Sandoval (nombre ficticio para proteger su verdadera identidad y empleo).
Sandoval, que imparte clases de la primera etapa en un colegio del Estado, hacia el oeste de Caracas, explicó que en una de las asambleas de docentes para planificar la Navidad 2017, el directivo les exigió en tono amenazante: “resaltar la navidad de acuerdo con los lineamientos del Gobierno, si no, nuestros puestos de trabajo estarán en peligro”.
Esto no es solo en Caracas. En el estado Miranda, las instrucciones son las mismas.
Muchos docentes de Guarenas, Guatire, Los Valles del Tuy y Altos Mirandinos, donde la Gobernación de la entidad fue alcanzada en las elecciones del 15 de octubre por el oficialista Héctor Rodríguez, han reportado las mismas instrucciones para la temporada navideña.
“Se ha prohibido vestir a los niños con gorros de San Nicolás, adornar los arbolitos, organizar obras de teatro, hacer representaciones de la Virgen María y las demás figuras del pesebre, porque ahora en Miranda quien manda es la revolución”, agregó Sandoval.
No debemos adorar a hombres
Las enseñanzas de la iglesia rechazan igualar a Jesucristo con algún gobernante o persona, por más amor que se le profese, porque Jesucristo es único e irrepetible, según ha expresado en diversas ocasiones el cardenal Jorge Urosa Savino. “No podemos nosotros ni rebajar a Jesucristo ni llevar a una persona humana al nivel de Dios Nuestro Señor”, sostiene.
Sin embargo, la idolatría chavista que se difunde desde el Gobierno de Maduro, ha trascendido las imágenes, e incorpora en este Plan de Navidad 2017, un conjunto de “beneficios” como el aumento salarial y bonos navideños contenidos en el Carnet de la Patria, un instrumento político para ganar el apoyo de las personas con menos recursos.
Ramón Antonio Pérez/Aleteia Venezuela