El paro de 48 horas que convocaron el miércoles los docentes universitarios venezolanos se
cumplió en al menos el 95 % de las casas de estudio del país, según dijo este viernes a Efe Lourdes Ramírez, presidenta de la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv).
“(El llamado) ha sido muy bueno en el sentido del cumplimiento, entre el 95 % y el 100 % en todas las universidades, de verdad la gente está muy molesta”, señaló Ramírez en una conversación telefónica con Efe.
La Fapuv agrupa a las asociaciones sindicales de las 18 principales universidades de Venezuela, que iniciaron hace tres semanas un conflicto laboral con el Estado en demanda de mejoras salariales que hagan frente a la rampante inflación en la nación caribeña, cuyo avance el Parlamento cifró en 2,8 % por día.
“Es insoportable ya, la gente quiere salir de esta situación tan grave que tenemos (…), o el Gobierno resuelve el problema de la inflación o con lo que den nunca va a alcanzar”, añadió la docente.
Ramírez señaló que la Fapuv propuso al Estado una tabla salarial que inicie con 300.000.000 de bolívares (2.500 o 120 dólares según la tasa de cambio que se use) como ingreso mínimo para los trabajadores del sector, y termine con 1.500.000.000 de bolívares (12.500 o 600) como sueldo para los docentes a dedicación exclusiva.
Eso es lo que nos corresponde por la función que nosotros desempeñamos”, aseguró.
El salario mínimo integral en Venezuela se ubica en 5.196.000 (poco más de 43 ó 2,1 dólares), y en medio del fenómeno hiperinflacionario que padece el país no alcanza para comprar siquiera un kilo de detergente.
Ramírez dijo además que esta propuesta es de conocimiento del Estado venezolano, pero que no ha podido ser entregada de manera personal al ministro de Educación Universitaria, Hugbel Roa, porque éste no quiere “atender” a los representantes de la Fapuv.
Venezuela, el país con las mayores reservas de petróleo en el planeta, sufre una grave crisis económica que se traduce en escasez de alimentos básicos y medicinas así como en hiperinflación, un fenómeno que pulverizó el poder de compra de los trabajadores.
El Gobierno de Nicolás Maduro ha respondido a este fenómeno con periódicos aumentos del ingreso mínimo y entregando a los trabajadores bonificaciones que no inciden en los cálculos salariales.
EFE