El electo presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador debe retirar la invitación hecha a Nicolás Maduro para su toma de posesión para así mantener su postura democrática.
La exhortación fue realizada por el dirigente opositor, ex presidente de los alcaldes de Vzla y primer alcalde de San Francisco Saady Bijani quien indicó que de continuar abierta la invitación los presidentes Latinoamericanos deberían asumir una fuerte posición de rechazo político y no asistir al evento diplomático.
Bijani expresó que Maduro ha establecido un récord antidemocrático muy claro que es reconocido por diferentes organismos internacionales que apoyan la instrumentación de medidas que permitan la salida de su gobierno.
Señaló que Maduro “acaba de ser sentenciado por corrupción y legitimación de capitales”, su acción represiva contra dirigentes de la oposición y el mismo pueblo venezolano ha conllevado a que varios países presenten una demanda ante la Corte Penal Internacional que encaucen una sentencia firme por crímenes de lesa humanidad.
Conminó a López Obrador seguir los procesos que lleva adelante la OEA, la ONU y la Unión Europea en contra del gobierno de Maduro por destruir la democracia, las libertades y todo el sistema económico.
Agregó que sobre los hombros de Maduro cabalga “la peor catástrofe humanitaria aunado a la implantación de una narcotiranía”.
Además López Obrador debe conocer que existen “nexos con el terrorismo internacional” muy peligrosa para la estabilidad y la paz de américa Latina.
Bijani expresó que una de las cosas que ha impulsado la nefasta administración de Maduro es “la migración y desplazados sin precedentes, convirtiendo a Venezuela no solo en una amenaza a la libertad y seguridad hemisférica sino a un factor de desestabilización social y sanitaria”.
Por otro lado el dirigente opositor destacó que México “está obligado, en aras de la solidaridad y coherencia, dejar sin efecto esa invitación ya que en los foros internacionales como la OEA, Grupo de Lima, ONU, ese México lindo y querido, ha desconocido la írrita e ilegal Asamblea Nacional Constituyente, igualmente rechazó el megafraude del 20-M y ha condenado a la dictadura por las constante violaciones de DDHH.
Por lo tanto “Si México no desiste entonces los presidentes y jefes de estados de las naciones libres no deben asistir a ese evento que merece ser prístino y faro de Democracia y libertad”.
Expuso que “sería ofensivo no tan sólo para el pueblo venezolano sino también para el pueblo mexicano y sería un triste y mal comienzo de la gestión de López Obrador”.
