En la Arquidiócesis de Caracas los catequistas han disminuido debido a la migración por razones humanitarias
“Que hermoso que podamos comenzar este curso con nuevas perspectivas desde la catequesis. Yo les tengo verdadera devoción a todos los catequistas porque ustedes son los que hacen el trabajo y hacen de verdaderos evangelizadores. ¿Quién les enseñó a Ustedes a rezar? ¿Un cardenal, un obispo o un sacerdote? Seguro que fue la abuela, la mamá, la catequista”.
De esta manera se expresó el cardenal Baltazar Enrique Porras Cardozo, durante la Asamblea Anual de Catequistas de Caracas, actividad que se cumplió el 6 de octubre en el colegio San Ignacio de Loyola, en La Castellana.
“¿Quién de Ustedes recuerda el nombre de quien fue su catequista en la primera comunión?”, preguntó Porras a los asistentes, considerando importante tenerlos en la memoria, incluso, en su caso personal recordó al padre Hilario Briones, quien lo formó para ese sacramento en el colegio Fray Luis de León de Caracas.
“El ministerio mejor o mayor que pueda haber en la Iglesia es, precisamente, el de ser catequista”, dijo.
Aseguró estar convencido de que la “obligación nuestra es cómo convertir” a los niños, jóvenes y adultos, “en protagonistas de su propia fe”. “No que sigan lo que nosotros digamos sino que sientan ellos que son los que toman la batuta”.
“Por eso es importante tomar en cuenta esta etapa de los itinerarios” contenidos en el Concilio Plenario, la guía de la evangelización y formación de la Iglesia en Venezuela.
“La catequesis tiene que ser una experiencia comunitaria, y que exige de cada uno de nosotros, empezando por mí, a prepararnos permanentemente, porque uno nunca aprende y termina de ser catequista, y los muchachos siempre nos están enseñando”.
Caracas necesitas miles de catequistas
Porras recomendó “aprovechar el aprendizaje de tantas cosas positivas que se están haciendo en el mundo y que nos tiene que servir para la realidad que vivimos”, así como “utilizar el lenguaje adecuado en medio de las circunstancia que atraviesa el país”. Sugirió “evaluar lo que hacemos y lo que decimos”.
Habló de la cantidad de catequistas necesario en la Iglesia de Caracas. “Me alegra que tengamos este gran número de catequistas, pero Caracas tiene casi cinco millones de habitantes, por tanto, mil o tres mil catequistas no son suficientes”, expuso.
“Que esto no solo sea el arranque de un trabajo sino que además sirva para entrar de lleno en los itinerarios catequísticos; es decir, en el proceso que hay que seguir haciendo porque es lo único que nos da esa capacidad de sembrar pequeños valores en los muchachos, en medio de los ofrecimientos de muchas otras cosas”, dijo.
Implementar los itinerarios catequísticos
A la asamblea concurrió, aproximadamente, un millar de catequistas de más de 80 parroquias de Caracas, respondiendo así a la convocatoria del padre Carlos Márquez, vicario episcopal para la catequesis y formación laical de la iglesia arquidiocesana.
El sacerdote comentó que están “introduciendo, invitando y animando a los catequistas que se metan en la renovación de la pastoral catequística de acuerdo con dos pilares”: primero, “la implementación de los itinerarios de catequesis para niños, jóvenes y adultos; y segundo, “tener como centro la catequesis de adultos en la Arquidiócesis”.
Estos itinerarios serán “un proceso gradual que vamos a llevar a cabo realizando asamblea de comunión”, en las distintas instancias de la iglesia caraqueña. “La idea es ponernos de acuerdo de cómo vamos a caminar todos juntos para implementar los lineamientos de la catequesis del Concilio Plenario de Venezuela”, indicó.
Reconoció que, no obstante, la existencia de un estimado actual de tres mil catequistas en la Iglesia de Caracas, “eso no es suficiente”. “Entre otras razones, también hemos sufrido los embates de los catequistas que han tenido que irse del país por razones humanitarias, entonces necesitamos renovar la plantilla y el número de ellos”.
Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
El Guardián Católico