Insistió en que el contenido de la carta sobre el diálogo entre Gobierno y oposición fechada el 1 de diciembre de 2016 y escrita por el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, ‘está muy vigente’.
En relación a la designación de Roy Chaderton dijo que “genera muchas dudas”.
El arzobispo de Maracaibo y presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) señaló que en su país se vive “una situación límite de desplome y colapso” y que el proyecto del “socialismo del siglo XXI” impulsado por el Gobierno de Nicolás Maduro “está por encima de cualquier consideración humanitaria”.
Monseñor José Luis Azuaje participó en la presentación de un informe de la Conferencia Episcopal alemana (DB) sobre la situación de los cristianos en Cuba y Venezuela donde además criticó la “judicialización de la protesta” y dijo que “los que protestan (contra el régimen) son sometidos a represión pero también encarcelados”.
“Los obispos hemos encontrado que todos estos males tienen una razón: la implementación de un proyecto político totalitario”, agregó el arzobispo, quien dijo que se trata de un plan “que el Gobierno se empeña en mantener”.
Embajador en el Vaticano
En relación con la designación de Roy Chaderton como nuevo embajador de Venezuela ante la Santa Sede, todavía no confirmada oficialmente, dijo de él que “es una persona que ha sido muy crítica especialmente con todos aquellos que no sean afectos al gobierno de Maduro”.
“Por lo tanto, genera muchas dudas y eso es lo que tanto a las instituciones como también al pueblo venezolano le provoca este tipo de designación”, agregó el presidente de la CEV.
“El papa (Francisco) conoce muy bien la situación que vive el pueblo venezolano”, añadió, a propósito de la reunión que los obispos venezolanos mantuvieron el pasado 11 de septiembre en el Vaticano con el pontífice.
Insistió en que el contenido de la carta sobre el diálogo entre Gobierno y oposición fechada el 1 de diciembre de 2016 y escrita por el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, “está muy vigente”.
Aludió a cuatro elementos incluidos en esa carta: reconocer las competencias de la Asamblea Nacional, abrir un canal de ayuda humanitario, facilitar todo las elecciones con elementos que sean fiables y liberar a los presos políticos.
“Esas cuatro condiciones no se han cumplido, lo cual implica que es muy dudoso que se pueda llegar a un diálogo verdadero”, agregó Azuaje.
Reporte Católico Laico