Monseñor Tulio Ramírez, obispo auxiliar de Caracas y quien se desempeña como vicepostulador de la causa de beatificación del médico trujillano José Gregorio Hernández desde hace tres años, recibió con mucho entusiasmo la noticia del inicio de la llamada etapa romana de la instrucción del presunto milagro a la niña guariqueña, Yaxury Solórzano Ortega, de 12 años.
“Los obispos venezolanos estamos agradecidos con Dios por esta manifestación de la obra milagrosa de José Gregorio”, expresa, en conversación telefónica con PANORAMA, al tiempo que explicó que con la entrega al Vaticano, el pasado viernes, del expediente de la posible acción divina por la intercesión del doctor Hernández se dio por terminada la fase diocesana del proceso.
“Toca orar inmensamente a Dios para que este presunto milagro se convierta en el milagro que esperamos para que el Venerable sea llevado a los altares”, exhorta el prelado, instando a todos los venezolanos a unirse en oración por la pronta declaración de beato del llamado médico de los pobres.
Considera que la celebración este año del centenario del fallecimiento del también científico y profesor universitario, por arrollamiento en La Pastora, en la capital del país, el 29 de junio de 1919, constituye una gran oportunidad para que en todas las parroquias del país se realicen actividades y jornadas de oración para que José Gregorio Hernández se convierta en el cuarto feligrés local en ascender a los altares patrios, después de las religiosas María de San José, Candelaria de San José y Rendiles, fundadoras de congregaciones.
Recordó que en la arquidiócesis de Caracas, el cardenal Baltazar Porras, su administrador apostólico, declaró el pasado lunes 14 el inicio del año jubilar por los 100 años de la muerte de quien fue declarado Venerable por el papa Juan Pablo II hace 33 años, tras demostrarse que vivió en grado heroico las virtudes teologales y cardinales,
Asegura, sin embargo, Ramírez que la decisión por parte de la Santa Sede no es tan expedita, sobre la base de que “hay que esperar turno, porque son muchos los casos” que recibe el referido dicasterio.
“La beatificación del Venerable contribuiría con el pacto social que tanto necesitamos en Venezuela, a que unos y otros nos unamos en torno a él en medio de la difícil situación que vivimos”, sentencia el prelado caraqueño.
Asevera que el caso de la presunta curación de la niña del pueblo guariqueño Mangas Coveras en el hospital Pablo Acosta Ortiz, en San Fernando de Apure, tiene “altas probabilidades de que sea aprobado, porque está bien sustanciado por el tribunal eclesiástico que se instaló en San fernando de Apure y porque cuenta con el aval de uno de los médicos que trabajan en la Congregación de la Causa de los Santos”.
Reveló que han sido muchos los casos de posibles milagros del médico nacido en Isnotú, en Trujillo, el 26 de octubre de 1864, durante los 70 de la causa, que han sido trabajados, sin precisar la cifra, y puntualizó que no fueron presentados al Vaticano por ser desaprobados por un médico vaticano, debido a diversas razones, sobre todo por falta de documentación, y por diagnósticos y exámenes médicos deficientes.
En ese sentido, precisó que fueron tres los últimos casos que no prosperaron porque fueron desestimados por el mencionado perito médico: uno en 2017 y dos en 2018.
“En la oficina de la causa de beatificación recibimos mucha información, que clasificamos como baja, media y alta probabilidad de ser milagros, y entonces trabajamos con estos últimos, con mucha prudencia y laboriosidad, porque en Roma son muy exigentes”, dijo.
También advirtió que los casos de supuesta curación tras la invocación al Venerable de personas con “tumores cancerígenos son muy complicados de comprobar”, debido a la reincidencia y por las metástasis.
Panorama – Reporte Católico Laico