Esta profesional del orden publica un libro en el que nos enseña a organizar la casa
Libros sin ordenar, juguetes tirados como trampas mortales, correos sin responder, pantalones que nunca nos ponemos, cocinas llenas de grasa… Nuestra vida es acumular, desordenar y limpiar. Pía Nieto, con su libro Manual para organizar tu casa (Arcopress) es nuestra Marie Kondo mediterránea. Sus páginas contienen recetas indispensables para ordenar, intentar disciplinarnos en nuestro entorno y lograr un hogar feliz.
PREGUNTA.- ¿Qué nos vamos a encontrar en tu libro?
RESPUESTA.- Las herramientas necesarias para tener la casa organizada, de manera que el trabajo sea más sencillo y nos reporte felicidad y tranquilidad.
P.- En un hogar ordenado, ¿las personas son más felices?
R.- Sí, porque todo es más previsible. Cada cosa está en su sitio y se encuentra todo. Eso provoca paz y bienestar. El orden afecta a las cosas materiales e inmateriales. Significa que todo tenga su sentido. Si en lo que me rodea hay caos, repercute en mi cerebro, y al revés.
P.- ¿Organizar ayuda a ganar tiempo?
R.- Sí, y es lo más sano y ecológico del mundo. Arañar minutos al día es imprescindible, por eso las mediciones de tiempo son lo primero que tengo en cuenta. De ahí que invite a hacer una programación de la suma de tareas. (…)
P.- No sé si ha visto el “hogar” de Francisco.
R.- Cuando fue elegido Papa se produjo mucho revuelo porque decidió no vivir en las estancias vaticanas sino en Santa Marta, porque no quería vivir en un palacio sino en un hogar, de lo contrario se hubiera muerto de tristeza. Por otra parte quiero decir que Su Santidad, además de evocarme la palabra “casa”, “hogar”, me parece un gran pastor de periferias porque va en busca de todos… Eso es una sacudida para el mundo católico y el que no lo es.
P.- ¿Le pondría algún pero a sus “estancias”?
R.- La habitación, por lo que he visto en prensa, es muy pequeña: dos cámaras con lo estrictamente necesario pero los detalles necesarios para hacer hogar. La sala de estar es austera y sobria, como lo que predica. La capilla… me pega menos para un hombre tan sobrio, con tanto mármol. Pero todo lo demás, seguro que es un estilo con el que se siente seguro para meditar y crear paz.
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