El cardenal Baltazar Porras ha denunciado la grave situación que está pasando la población venezolana a los delegados italianos de Ayuda a la Iglesia Necesitadaque acaban de visitar el país. Para ello, el prelado basa su información en el último informe de Cáritas sobre la crisis alimentaria en el referido país sudamericano, según informa la web Portaluz.
El 80% de las familias viven con insuficiencia alimentaria. El 12% de los niños menores de 5 años están gravemente desnutridos. El consumo de alimentos se ha reducido a la mitad, al igual que el PIB. La inflación alcanzó el 1.698.488% y la tasa de desempleo el 27%. Los sistemas de salud y educación se redujeron en un 60% y un 70%, respectivamente.
En Venezuela, en algunos lugares la desnutrición infantil afecta al 18% de los niños
Esta es la brutal imagen que surge del Informe Desafíos 2019, publicado en los últimos días por Cáritas Venezuela.
Los niños son las primeras víctimas de esta grave crisis, como consecuencia del deterioro constante de las condiciones de la población venezolana desde 2016 y especialmente en los últimos meses. “La emergencia más grave la padecen los niños menores de 5 años – informa Janeth Márquez, Directora Ejecutiva de Cáritas Venezuela, reunida en Caracas con una delegación de Ayuda a la Iglesia Necesitada encabezada por el Director Alessandro Monteduro-, el 12% de ellos están gravemente desnutridos y en algunas zonas el porcentaje aumenta al 18%. Las últimas estadísticas disponibles muestran un aumento de la mortalidad infantil del 33% entre 2015 y 2016“.
Ante esta dramática situación, el Cardenal Porras ha lanzado una llamada: “Es importante que la situación en Venezuela, percibida por muchos como un país rico por la presencia del petróleo, sea conocida en todo el mundo. Porque sólo el gobierno se beneficia de esta riqueza, no el pueblo. Es hora de que los estados europeos se den cuenta de que la situación aquí es tan grave como en Siria, aunque aún no haya guerra“.
La crisis alimentaria alcanza proporciones inimaginables
“Faltan las necesidades básicas y cuando se encuentran no hay dinero para comprarlas”, comentó el Cardenal Baltazar Porras, presidente de Caritas Venezuela, arzobispo de Mérida y administrador apostólico de Caracas. La altísima inflación disminuye el valor de los salarios cada día. “Con un salario mínimo mensual sólo se pueden comprar entre 12 y 15 huevos“, señala el cardenal. El salario mínimo -alrededor de 18.000 bolívares- equivale de hecho a sólo 5,4 dólares al mes, con un poder adquisitivo de sólo el 4,3% de los alimentos que necesita una familia cada mes. En la práctica, se afirma en el Informe de Caritas, un núcleo familiar necesitaría 23 salarios para cubrir la necesidad mínima mensual de alimentos.
Es también debido a la grave crisis alimentaria que 3,5 millones de venezolanos han abandonado el país. “Más de 700.000 han emigrado a Perú -dice el Cardenal Porras-, mientras que un millón en Colombia se ha transformado en un problema geopolítico”. Muchos expatriados tratan de ayudar a sus familias, pero se ven obligados a dejar a sus hijos en casa, confiándolos a sus abuelos u otros parientes. “Debido a la migración forzada – puntualiza el Informe de Caritas – más de 600.000 niños venezolanos viven sin sus padres, un factor más que hace que los pequeños venezolanos sean aún más vulnerables”.
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