El recorrido de las siete iglesias en la noche del Jueves Santo –que en algunos lugares se extiende a la mañana del Viernes Santo– es sin duda una de las tradiciones más comunes de la Semana Santa en toda América Latina.
Estas visitas, y la oración en cada una de ellas, simbolizan el acompañamiento de los fieles a Jesús en cada uno de sus recorridos desde la noche en que fue apresado hasta su crucifixión.
A continuación el sentido de cada uno de los 7 recorridos:
- Primera iglesia
En la primera iglesia se recuerda el trayecto de Jesús desde el Cenáculo, en donde celebra la Última Cena con sus discípulos, hasta el huerto de Getsemaní en donde ora y suda sangre.
- Segunda iglesia
En la segunda se medita sobre el paso desde el huerto de Getsemaní hasta la casa de Anás, donde fue interrogado por este y recibe una bofetada.
- Tercera iglesia
En la tercera iglesia, la oración se centra en el recorrido de Jesús hasta la casa de Caifás, lugar donde recibió escupitajos, insultos y sufrió dolores durante toda la noche.
- Cuarta iglesia
El centro de la reflexión para la cuarta iglesia es la primera comparecencia de Jesús ante Pilatos, el gobernador romano de la región. Allí Jesús fue acusado por los judíos que levantaron falsos testimonios contra él.
- Quinta iglesia
En la quinta iglesia se acompaña al Señor en su comparecencia ante el rey Herodes, quien junto con sus guardias también lo injurian.
- Sexta iglesia
En la sexta iglesia se medita sobre la segunda comparecencia ante Pilatos y cuando Jesús fue coronado con espinas y condenado a muerte.
- Séptima iglesia
En el último templo recordamos el recorrido de Cristo desde la casa de Pilato hasta el Monte Calvario llevando la cruz a cuestas, su muerte y su paso al sepulcro, de donde resucita al tercer día.
Esta meditación se hace de manera especial y más intensa durante la oración del Vía Crucis, el Viernes Santo.