Este lunes 30 de agosto, la presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) publicó un comunicado a través de sus redes sociales mostrando su postura ante las inundaciones y los deslaves que afectaron a la población de diferentes municipios del estado Mérida, y los cuales se cobraron la vida de al menos 20 personas.
En el texto, expresan su solidaridad a las personas afectadas y agradecen el apoyo de todas las organizaciones y ciudadanos de diferentes lugares del país que ofrecieron ayuda humanitaria de manera inmediata ante los daños que ocasionaron las lluvias, las cuales dejaron como consecuencia a más de 20 muertos, decenas de heridos y de desaparecidos, y muchas familias que perdieron todos sus enseres.
“Gracias a la respuesta inmediata de tantas personas de buena voluntad se ha podido brindar ayuda en diversas especies, desde medicinas y alimentos, hasta ropa y otros insumos necesarios. La caridad no tiene límites, ni pone condiciones para practicarla como poco discrimina los destinatarios de las obras de misericordia”, expresó la CEV.
Pero de la misma manera, denunciaron a funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), a quienes señalaron, junto a diferentes autoridades civiles, de impedir la entrada de la mayoría de la ayuda a los diferentes municipios afectados.
“No solo han impedido el acceso de gran parte de la ayuda enviada desde diversas partes del país, sino que han tenido una actitud de displicencia y ofensa hacia los miembros de la Iglesia y de otras instituciones. Afirman haber recibido órdenes de la superioridad, que en todo caso debería dar la cara. Les exhortamos a cambiar su actitud y colocarse al servicio de las instituciones que sí están colaborando” manifestó la presidencia de la CEV.
Asimismo, hicieron un llamado a las autoridades nacionales, regionales y militares para que “actúen no por intereses particulares. Deben recordar que están al servicio de todos los venezolanos y no de una parcialidad política”.
Monseñor Rojas denunció atropello de la GNB con ayuda humanitaria
En horas de la tarde de este domingo 29 de agosto, se registró una situación irregular en Mérida cuando tres efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) abordaron una unidad que trasladaba ayuda humanitaria de Cáritas destinada para los damnificados de Tovar.
Tras el hecho, el obispo auxiliar de la entidad, monseñor Luis Enrique Rojas, reclamó a los uniformados por el acoso.
El obispo denunció que funcionarios del Estado han practicado este tipo de acciones para amedrentar a los pobladores.
«Ellos llegan molestando y entorpeciendo las labores», expreso el obispo.
#29Ago #Merida
Dip. Williams Dávila: @Pontifex_es esta dictadura incumple es inhumana no les importan nada la tragedia de Tovar vean cómo trancan a @CEVmedios Mon Kike Rojas. – @RCR750pic.twitter.com/ortvOiPF5i— Reporte Ya (@ReporteYa) August 29, 2021
#CEVNoticias Presidencia de la CEV dirige comunicado ante la grave situación en Mérida a causa de la temporada de lluvias https://t.co/UlDx3oqo9a pic.twitter.com/BMGeizsW3H
— Conferencia Episcopal Venezolana CEV (@CEVmedios) August 30, 2021
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