El Papa Francisco invitó a los cristianos a orar por las cien personas asesinadas en un ataque terrorista en la capital de Somalia, Mogadishu, y también por los más de 150 muertos que dejó una estampida en un festival de Halloween en Seúl, la capital de Corea del Sur.
“Mientras celebramos la victoria de Cristo sobre el mal y sobre la muerte, oremos por las víctimas del ataque terrorista en Mogadishu, que mató a más de cien personas, incluidos muchos niños”, dijo el Papa Francisco en la mañana del 30 de octubre.
Después pidió “¡que Dios convierta los corazones de los violentos!”.
El portavoz de la Policía somalí, Sadik Dodishe, dijo a la prensa intercional que el objetivo del ataque era asesinar al presidente Hassan Sheikh Mohamud, al primer ministro Hamza Abdi Barre y a cinco líderes de los estados federales que se reunieron en una conferencia en el Hotel Jazeera Palace, a 1.5 kilómetros del lugar donde explotaron dos bombas.
Didishe explicó que, como los terroristas no pudieron alcanzar el hotel, destinaron sus ataques contra el Ministerio de Educación, provocando decenas de muertes en las zonas aledañas.
“Roguemos al Señor Resucitado también por aquellos, especialmente los jóvenes, que murieron en Seúl, como consecuencia trágica de un repentino aumento de la multitud”, dijo el Pontífice.
Aún no se ha clarificado la causa de la estampida humana. Muchos jóvenes fallecieron al ser pisoteados.
ACI Prensa
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