La misa marca el inicio de la Semana Mayor y conmemora la entra triunfante de Jesús de Nazaret a Jerusalén
A pesar del trasnocho y el calor dentro de las algunas iglesias, como la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá, ocasionados por los horarios de racionamiento impuestos por el Gobierno regional, los marabinos asistieron a la misa que marca el inicio de la Semana Mayor.
Con palmas en mano los marabinos conmemoraron la entrada triunfante de Jesús de Nazaret a Jerusalén montado en un pollino. En el Santuario Mariano la asistencia era colmo hasta el último rincón del templo en todos los horarios en los que se ofrece la eucaristía.
La misa de las 9.30 de la mañana estuvo a cargo de Eduardo Ortigoza, presbítero y rector de la Universidad Católica Cecilio Acosta, quien tuvo que dar la eucaristía sin equipos de sonido por la carencia de electricidad.
Las personas se aglomeraron alrededor del pasillo central de la basílica para recibir la bendición por parte de Ortigoza al principio de la eucaristía.
Lenis Paz, de 65 años, es una colombiana que viajó al país para visitar a su hijo, quien la llevó a la basílica. Asegura que le causó impresión la asistencia de las personas y como a pesar de la situación la gente asistió a la celebración eucarística.
Ronald Bermúdez, servidor de María, informó que limpiaron palmas hasta las 3.00 de la tarde aunque estimaba terminar más temprano, según él, estos momentos de crisis que vive el país empuja a la gente a buscar más fuerzas en Dios.
José Manuel Sánchez / Diario La Verdad
